Obstrucción del conducto lagrimal
también conocido como: dacriostenosis.
¿Qué es una obstrucción del conducto lagrimal?
El conducto lagrimal (conducto nasolagrimal) es la vía que transporta las lágrimas desde la esquina del ojo hasta la nariz. La obstrucción (que se manifiesta en hasta el 10 % de los bebés recién nacidos, y en un 30 % de los niños, el bloqueo sucede en ambos ojos) impide que las lágrimas lubriquen el ojo adecuadamente o fluyan con normalidad.
¿Qué causa una obstrucción del conducto lagrimal?
La obstrucción del conducto lagrimal es frecuente al momento del nacimiento debido a que el conducto no está completamente desarrollado. En casos poco frecuentes en los niños, esto puede ser el resultado de infección, inflamación, lesión, tumores o por otros motivos.
¿Cuáles son los síntomas de una obstrucción del conducto lagrimal?
Por lo general, el ojo se ve normal (salvo que presente infecciones secundarias), pero la manifestación es un ojo lleno de lágrimas acuosas constantes que caen por el rostro (ocurre a las pocas semanas de vida).
¿Cuáles son las opciones de atención de la obstrucción del conducto lagrimal?
La mayoría de los conductos lagrimales con obstrucción se abrirán por sí solos al año de vida. Un tratamiento frecuente incluye masajear el conducto de 2 a 3 veces por día. Si hay infección, se puede recetar una pomada antibiótica para el ojo. Es posible que sea necesario dilatar el conducto (a veces más de una vez) con una sonda (u otro mecanismo). En ocasiones, se recomienda la cirugía si los otros tratamientos no tienen éxito.
Revisado por: Jack Wolfsdorf, MD, FAAP
Esta página fue actualizada por última vez en: febrero 03, 2020 12:23 p. m.