Actualmente estamos viendo una cantidad cada vez mayor de niñas que practican deportes competitivos, con aproximadamente 200,000 a nivel universitario. Esto aumenta en 200,000 a nivel universitario. Este aumento en la participación ha proporcionado a las atletas mujeres muchos beneficios sociales y de salud, incluidos una mejor condición física, confianza, trabajo en equipo y un menor riesgo de obesidad.