Por Nayda Torres-Soto, PhD, CCC-SLP y Wilma Benitez-Rivera, PhD, CCC-SLP
¿Por qué mi hijo no se comunica? ¿Por qué las horas de las comidas son una batalla? Estas son algunas de las preguntas que se hacen a los terapeutas del habla y del lenguaje cuando se reúnen por primera vez con familias que buscan terapia para un niño pequeño. A veces, no es solo la falta de “habla” o las dificultades para comer en lo que se centra nuestra evaluación. A veces, somos los primeros en decirles a los padres o cuidadores que el niño tiene lo que llamamos “signos de alarma de autismo”.
¿Cuáles son los “signos de alarma” de autismo en relación con la comunicación?
Los siguientes pueden ser indicadores de que un niño tiene autismo (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, 2019). El niño:
- No responde a su nombre a los 12 meses de edad
- No señala objetos para mostrar interés (señalar un avión volando) a los 14 meses
- No juega a juegos de simulación (fingir que da de comer a una muñeca) a los 18 meses
- Evita el contacto visual y quiere estar solo
- Tiene problemas para comprender los sentimientos de otras personas o para hablar sobre sus propios sentimientos
- Tiene retraso en las habilidades del habla y el lenguaje
- Repite palabras o frases una y otra vez (ecolalia)
- Brinda respuestas no relacionadas a las preguntas
- Se molesta por cambios menores
- Tiene intereses obsesivos
- Agita sus manos, mece su cuerpo o gira en círculos
¿Cuáles son algunos “signos de alarma” adicionales en relación con la alimentación?
Los siguientes problemas de alimentación pueden indicar que un niño tiene autismo (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, 2019). El niño:
- Tiene reacciones inusuales a la forma en que las cosas suenan, huelen, saben, se ven o se sienten
- Tiene hábitos inusuales de alimentación y sueño
- Limita su dieta a solo unos pocos alimentos
- Come artículos que no son alimentos
- Tiene problemas como el estreñimiento crónico
Algunos padres o cuidadores notan muchos de estos “signos de alarma” ya en el primer cumpleaños de sus hijos. Quizás haya visto algunos de estos comportamientos y haya compartido sus inquietudes con familiares o amigos, pero le han dicho que le dé tiempo a su hijo. ¿O tal vez sus familiares y amigos siempre preguntan “qué es lo que está mal con su hijo?” pero usted no ve nada mal. Y tiene razón, no hay nada “malo” con su hijo. Pero podría ser el momento de hablar con el pediatra de su hijo o incluso con otros especialistas, como un neurólogo o neuropsicólogo, para que puedan ayudarle a determinar si el comportamiento de su hijo está asociado con el autismo u otra afección.
Si bien un neurólogo o neuropsicólogo es una parte importante del equipo de atención, no es necesario que su hijo consulte a un neurólogo o neuropsicólogo antes de comenzar la terapia del habla y/o la alimentación. Todo lo que su hijo necesita es una derivación de su pediatra para que se le realice una evaluación del habla y el lenguaje y/o una evaluación de la alimentación y la deglución para determinar si se necesita terapia.
Sin embargo, una vez que comience la terapia, si su hijo muestra “signos de alarma” de autismo, su terapeuta hablará con usted y lo derivará para que consulte a un especialista.
¿Cómo es la terapia del habla y el lenguaje?
Durante la evaluación del habla y el lenguaje, usted y el terapeuta identificarán las fortalezas comunicativas de su hijo y algunas de las áreas en las que su hijo necesita ayuda, y juntos redactarán algunas metas de la terapia. La terapia debe parecer como si todos estuvieran aprendiendo y divirtiéndose. Usted será un participante activo en la terapia y aportará ideas de cosas que puede hacer en su hogar para apoyar la terapia. Puede esperar muchas actividades de juego, juguetes, canciones, cualquier cosa que llame la atención de su hijo y le enseñe a hacer pedidos simples, llamar la atención, seguir órdenes, etc. También puede haber algo de llanto o rehusarse a participar en actividades, pero no se preocupe; una vez que todos aprendan la rutina, las cosas deben comenzar a fluir con más facilidad.
¿Qué aspecto tiene la terapia de alimentación y deglución?
Durante la evaluación de la alimentación y deglución de su hijo, usted y el terapeuta buscarán pistas o patrones en la forma en que su hijo come. El terapeuta observará cómo come su hijo, cómo se mueve la boca y la lengua y cómo reacciona a los diferentes alimentos. Responderá preguntas sobre las preferencias de alimentación de su hijo. ¿Le gusta comer solo carbohidratos, alimentos crujientes, bocadillos, alimentos de ciertos colores o solo comer con una taza o plato determinado? ¿Hay problemas para masticar ciertos alimentos, problemas para aceptar alimentos “húmedos” o ambos?
Según las observaciones y respuestas a estas y otras preguntas, la terapia podría ayudar a su hijo a mejorar sus habilidades de masticación, aceptar nuevos alimentos y/o texturas, o ambos. Puede esperar participar en las sesiones, llevar los alimentos que desea que su hijo aprenda a comer, pero también llevar los alimentos que su hijo ya está comiendo sin dificultad. El terapeuta de su hijo le enseñará estrategias sobre cómo incluir nuevos alimentos y le ayudará a crear un programa de comidas en el hogar. Y no se preocupe si al final de la sesión de terapia hay comida por todas partes. Usted y su hijo aprenderán a usar estrategias que posiblemente puedan funcionar para sus necesidades individuales.
¿Qué puedo hacer después de leer este blog?
- Use la lista de “signos de alarma” y “otros posibles síntomas” y observe a su hijo
- Hable con el pediatra de su hijo acerca de sus inquietudes, pida derivaciones para terapia del habla y del lenguaje y/o terapia de la alimentación y programe una cita para una evaluación del habla y del lenguaje y/o una evaluación de la deglución-alimentación.
- Aun cuando no desee usar la palabra “autismo” o “signos de alarma” cuando hable con su pediatra, venga a ver a un terapeuta del habla y del lenguaje. Le ayudaremos a comprender las cosas, hablaremos sobre los profesionales a los que debería ver su hijo y los próximos pasos.
Recursos importantes:
• Autismo (Trastorno del Espectro Autista)
Trastornos de la alimentación y la deglución en niños
Por Nayda Torres-Soto, Ph.D., y Wilma Benitez-Rivera, Ph.D.
La Dra. Nayda Torres-Soto y la Dra. Wilma Benitez-Rivera son patólogas bilingües del habla y el lenguaje/especialistas clínicas certificadas dentro del Departamento de Servicios de Rehabilitación de Nicklaus Children’s Hospital, cada una con 20 años de experiencia. Evalúan y tratan a pacientes pediátricos con diversos trastornos y entrenan a los cuidadores sobre el modo de ayudar a sus hijos a salir adelante. Los intereses clínicos de la Dra. Torres-Soto incluyen el uso de herramientas y tecnologías para apoyar las habilidades de comunicación de los niños y el interés clínico de la Dra. Benitez-Rivera incluye el uso de diferentes enfoques para ayudar a los niños a aceptar y manejar alimentos y líquidos de manera segura para apoyar sus habilidades de alimentación/deglución.