Cuando Olivia, quien entonces tenía 7 años, y sus padres llegaron a Nicklaus Children’s Hospital por primera vez en mayo de 2023, eran una familia en estado de conmoción.
Solo algunos días antes, la estudiante de primer grado de Pompano Beach había estado viviendo la vida de una ferviente gimnasta, practicando la barra de equilibrio, los ejercicios en el piso y más hasta seis horas al día.
Sus padres, Colleen y Matt, habían estado colaborando con el médico de Olivia para explorar la fuente del dolor episódico en las piernas de la niña activa, cuando una RM reveló lo que parecía ser un crecimiento canceroso en el fémur izquierdo.
“Me había olvidado completamente de la RM”, recuerda Colleen, una madre ocupada con dos hijos. “No esperaba nada extraordinario. Quizá una pequeña lesión en un hueso. Por eso, cuando el médico llamó para dar los resultados, fue un shock para nosotros”.
En solo unos días, Olivia ya se encontraba bajo el cuidado de dos médicos de Nicklaus Children’s, la Dra. Maggie Fader, una hematóloga oncóloga del Helen & Jacob Shaham Instituto de Cáncer y Enfermedades de la Sangre, y el Dr. H. Thomas Temple, un cirujano ortopédico con privilegios quirúrgicos en el hospital. El diagnóstico: Osteosarcoma de fémur.
Los doctores Fader y Temple trabajaron en colaboración en un plan de atención que incluyó quimioterapia y cirugía para extirpar partes del fémur canceroso, reemplazándolo con una prótesis de fémur magnética especial de titanio. La prótesis interna se ajusta gradualmente para crecer junto con Olivia, lo que evita la necesidad de cirugías frecuentes.
Después de siete meses de tratamiento combinado hospitalario y ambulatorio, Olivia y su familia pudieron tocar la campana en la unidad de atención del cáncer del hospital, lo que significa el fin del tratamiento. Toda la familia estuvo en casa a tiempo para la Navidad.
“Estamos muy agradecidos con todos los que trabajan en Nicklaus Children’s. No podríamos haber estado en mejores manos y estamos muy agradecidos de haber tenido la oportunidad de quedarnos aquí en Florida para recibir la atención que necesitábamos”, dijo Colleen. Los doctores Fader y Temple estuvieron increíbles y todo el equipo de atención, incluido el personal de enfermería y los especialistas de vida infantil, estuvieron allí para levantarnos y hacernos avanzar durante esos primeros días tan desalentadores”.
Hoy, Olivia está aprendiendo a tocar la guitarra y a cantar y escribir canciones, después de enamorarse de la música, durante las sesiones de musicoterapia en Nicklaus Children’s Hospital.
¿El nuevo sueño de Olivia para el futuro? Ahora tiene la mirada puesta en convertirse en médica o enfermera de Nicklaus Children’s, para poder ayudar a otros niños a recuperarse de la enfermedad.
Su equipo de atención de Nicklaus Children’s no podría estar más orgulloso.