Por Sean P. Horan, DO, psiquiatra pediátrico y David Mancuso, director ejecutivo de Servicios de Farmacia y Laboratorio
La depresión y la ansiedad afectan significativamente a muchos niños y adolescentes. Para quienes luchan con estas afecciones, los medicamentos a menudo son una opción de tratamiento eficaz. Por lo general, los psiquiatras recetan antidepresivos después de un examen exhaustivo para excluir otros problemas médicos o conductuales.
Muchos padres expresan inquietudes acerca de que su niño/a comience a tomar antidepresivos, especialmente con respecto a los posibles efectos secundarios y la eficacia del medicamento. En respuesta a estas inquietudes, hay una creciente tendencia hacia la terapia personalizada. Este enfoque tiene en cuenta factores individuales como la composición genética, que puede influir en la forma en que un paciente metaboliza y responde a los medicamentos.
Farmacogenética
La PGx (farmacogenética) se centra en estos factores genéticos para predecir la eficacia y los efectos secundarios del fármaco, mejorando así los resultados mediante la personalización de los tratamientos de acuerdo con los perfiles genéticos. Los estudios indican que las diferencias genéticas pueden representar hasta el 30 % de la variabilidad en la respuesta al tratamiento.
Las familias que consideran los antidepresivos para sus niños pueden encontrar apoyo a través del Programa de Farmacogenómica en Nicklaus Children’s Hospital. Este programa ofrece pruebas genómicas para identificar los medicamentos que probablemente produzcan los mejores resultados clínicos con la menor cantidad de efectos secundarios. Es accesible para pacientes con diversos diagnósticos, incluidos trastornos del estado de ánimo, cáncer y afecciones sanguíneas.
Codificación de genes para enzimas metabolizadoras de fármacos
La capacidad de identificar alternativas óptimas de medicamentos a través de la farmacogenómica representa un avance significativo para los pacientes que lidian con la depresión. Tradicionalmente, algunos pacientes podrían necesitar probar múltiples antidepresivos antes de encontrar uno que funcione. La farmacogenómica mejora las probabilidades de identificar un medicamento que sea más eficaz y/o que tenga menos efectos secundarios más rápido que nunca.
Por ejemplo, las variaciones genéticas en enzimas como la CYP2D6, la CYP2C9, la CYP2C19 y la CYP2B6 afectan significativamente el metabolismo de la droga y sus concentraciones sanguíneas. Esto es crucial para los medicamentos psicotrópicos, de los cuales hay porcentajes significativos que son metabolizados por estas enzimas. Los antidepresivos, como la fluoxetina, la fluvoxamina y la paroxetina, dependen principalmente de la CYP2D6, mientras que el citalopram y la sertralina son metabolizados por la CYP2C19.
Categorías de antidepresivos
Las pruebas pueden determinar qué categorías de antidepresivos y productos específicos pueden ser más eficaces:
- SSRI (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina): estos medicamentos mejoran el flujo de serotonina en el cerebro, por lo que ayudan a regular el estado de ánimo, el sueño y otras funciones.
- SNRI (inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina): esta clase promueve el flujo de serotonina y noradrenalina, neurotransmisores que ayudan a regular el estado de ánimo y la ansiedad.
- ATC (antidepresivos tricíclicos): los TCA, que se encuentran entre los primeros antidepresivos desarrollados, aumentan la serotonina y la noradrenalina en el cerebro, pero se recetan con menos frecuencia hoy en día debido a sus efectos secundarios en comparación con los SSRI y los SNRI.
- NDRI (inhibidores de la recaptación de noradrenalina-dopamina): por ejemplo, el bupropión afecta el estado de ánimo al aumentar los niveles de dopamina y noradrenalina, y puede ser beneficioso para quienes no responden a los SSRI.
Cómo comenzar a administrarle antidepresivos a un/a niño/a
Dada la evidencia sustancial que respalda la farmacoterapia guiada por PGx, se recomienda enfáticamente para pacientes psiquiátricos. Después de un examen médico integral y de revisar los resultados de las pruebas de PGx, el médico hablará sobre los posibles efectos secundarios con el paciente y su familia. Esta conversación ayuda a todos los involucrados a reconocer e informar cualquier signo preocupante.
Si la familia acepta avanzar con el tratamiento, el/la niño/a tendrá citas de seguimiento para monitorear la evolución y evaluar la eficacia del medicamento. Las contribuciones de los padres durante el tratamiento son invaluables para evaluar el impacto de los antidepresivos. Además, puede recetarse terapia del habla o continuarse para alcanzar resultados óptimos.
Para obtener más información sobre el Programa de Farmacogenómica, visite www.nicklauschildrens.org/pharmacogenomics.